Ayer hablábamos sobre el Plan de negocio a cinco años vista.
Llegamos a una conclusión: el plan de negocio va después de la decisión de qué hacer con nuestra vida.
El plan de negocio es una consecuencia de qué hacer con la vida y nunca al revés. Sólo si somos responsables de nuestra vida, nuestro plan de negocio será verdaderamente exitoso.
Primero el qué, después el cómo. Primero lo personal y después lo profesional.
¿Empezamos el año con esta idea?
Sergio Fernández
1 comentarios:
Navengando he encontrado tu columna, interesante... Primero claridad personal, claridad en lo que se quiere y luego destinar los recursos en un buen negocio, seguramente es desde tu emocionar y tus pensamientos y conductas conectados con ello que es posible construir grandes empresas...
Leí también lo que hace mención a el primer dia del resto de tu vida.. una frase que puede llenarte de energía, y que implica hacerte conciente de querer avanzar aprendiendo de lo pasado y centrarte en cada instante del presente.
Es un desafio interesante.
Saludos Marcela.
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